“Cometí un error y quiero pedir perdón. Señor juez, lo único que pretendo es volver al lado de mi mamá, no me importa si me tienen que poner una de esas tobilleras”, señaló Ricardo Fabián Suárez, procesado por haber amenazado al gobernador Osvaldo Jaldo por redes sociales. Ayer, en una audiencia, un magistrado le prorrogó la prisión preventiva por 28 días.
El martes 19 de agosto el mandatario provincial se encontraba en Villa Quinteros, Monteros, para inaugurar una serie de obras realizadas en esa localidad. En ese marco, Jaldo había encabezado el acto, el cual fue emitido en vivo a través de la cuenta de Facebook del periodista Carlos Rosznercki.
Fue en esa transmisión que Suárez, un monterizo de 52 años, dejó un comentario que decía: “Se presta para boletearlo al hdp ese de JALDO como al senador colombiano y sacarlo con las patas para arriba. Amén” (Sic). El hombre escribió esa frase justo cuando el titular del Poder Ejecutivo estaba sin los guardias que lo custodiaban. Además hizo referencia al atentado que sufrió el parlamentario y candidato presidencial de Colombia, Miguel Uribe Turbay, que recibió un balazo durante un acto en junio y falleció días atrás.
Apenas se percató del comentario, el periodista decidió advertirles a las autoridades policiales por considerar que podría tratarse de un acto intimidatorio.
De esta manera, al enterarse de la situación, el jefe de Policía, Joaquín Girveau Olleta, dispuso que personal de Delitos Telemáticos, al mando de los comisarios Yolanda Álvarez, Diego Bernachi y Miguel Carabajal, inicie un “rastrillaje cibernético” para hallar la identidad del sospechoso.
Los investigadores pusieron a disposición del titular de la Unidad Fiscal Criminal I, Mariano Fernández, todos los informes técnicos con sus respectivas actuaciones.
Alarmas en la seguridad de Jaldo: detuvieron a un hombre que lo amenazó en las redes socialesEl fiscal solicitó una orden de allanamiento para secuestrar los dispositivos que podría haber utilizado para escribir el mensaje y con el objetivo de concretar su detención. El pedido fue aceptado por el juez Eduardo González. Efectivos del Grupo Cero, de la Ex Brigada y la Unidad Regional Oeste, supervisados por el fiscal, irrumpieron en el domicilio de Suárez, lo arrestaron y le decomisaron tres celulares.
Al día siguiente, en una audiencia, el auxiliar Gonzalo Guerra solicitó que se lo acusara de amenazas e intimidación a cometer delitos y que le dictaran la prisión preventiva por 30 días, planteos que fueron aceptados por el juez Sebastián Mardiza.
La prórroga
Ayer se realizó una nueva audiencia en la que Guerra pidió que se ampliara por sesenta días la medida cautelar. “Para el 2 de octubre tenemos turno para el análisis de los celulares. También hemos enviado un oficio a los administradores de Facebook de Argentina para que nos informen todas las publicaciones que realizó en los últimos tiempos”, sostuvo.
El representante de la Provincia, José María Molina adhirió al planteo. La defensora oficial Ana Josefina Alzogaray rechazó el pedido al considerar que el Ministerio Público ya había tenido el tiempo suficiente para investigar el caso. También destacó que su intención era cerrar el expediente a través de una probation, pero que su propuesta fue rechazada.
El Gobierno difundió el video del operativo policial que terminó con la detención del acusado de amenazar a JaldoDe pronto, el acusado pidió hablar y tiró a tierra la estrategia defensiva. “Fue un error lo que hice. No sé qué me pasó, quiero pedir disculpas. En Monteros saben quién soy y que soy incapaz de hacer algo así”, destacó Suárez, que está alojado en el penal de Benjamín Paz. “Lo único que pretendo es que esto se solucione rápido. Hace poco tiempo sufrí la pérdida de mi padre y eso me desestabilizó. Quiero que esto termine rápido, quiero volver al lado de mi madre que es todo lo que tengo en la vida”, añadió.
“Asumo toda la responsabilidad. Si quieren puedo tener la pulsera para volver a casa. Acá estoy muy lejos de ella y no tengo a nadie que me venga a visitar”, finalizó el imputado. El juez González aceptó parcialmente el pedido del acusador, ya que decidió prorrogar la prisión preventiva por 28 días al acusado. También instó a las partes para que analicen la posibilidad de que el caso se cierre a través de una solución alternativa, teniendo en cuenta lo expresado por el acusado.